Glycyrrhiza glabra
El regaliz también se conoce como palodulce, paloduz o regalicia, entre otros. Es originaria de la Europa Mediterránea y Oriente.
Florece desde Mayo hasta Julio, tiempo en el que se aprecian sus flores azules o violáceas, aunque su parte más utilizada está en sus raíces. La principal suele tener cerca de un palmo y de ella arrancan otros tallos del grosor de un dedo que se extienden entre uno y dos metros bajo tierra. Dichos tallos y otros retoños subterráneos son los que se utilizan para fabricar productos farmacéuticos y alimentarios, dejándose secar estos a una temperatura de no más de 35º después de haberlas lavado y pelado.
Propiedades del regaliz
Sus propiedades y aplicaciones son muchas, destaca su acción expectorante, aliviando los procesos catarrales y suavizando las mucosas respiratorias. Desde hace mucho tiempo se vienen usando las conocidas pastillas y caramelos de regaliz, que suelen aliviar los síntomas de congestión.
Respecto el sistema digestivo, el regaliz posee propiedades ligeramente laxantes y antiespasmódicas además de aliviar la acidez de estómago. Ayuda a aliviar digestiones pesadas, siendo además un protector del hígado.
Existen muchos remedios, algunos centenarios, de la medicina natural con el regaliz. Por ejemplo para regular la temperatura se toma el agua de regaliz, realizada por una decocción del mismo. En la actualidad se utiliza para otros problemas más de este siglo, el tabaquismo. Para dejar de fumar se aconseja chupar o morder una raíz de regaliz, pues por el efecto psicológico muchos fumadores necesitan llevarse algo a la boca. Además posee efectos desintoxicantes, por lo que puede ayudar a limpiar el organismo, algo necesario en un fumador.
Por su aroma y sabor se utiliza mucho como corrector en infusiones, alimentos y medicinas. Hoy en día se puede encontrar en el sabor de numerosas golosinas para niños, así como en el formato más tradicional: los palos de regaliz, que durante muchos años fueron la delicia de nuestros antepasados.